Estos días se está discutiendo una iniciativa de la Comisión Europea, en la que se propone que los pescadores en paro cambien la captura de peces por la del plástico que va a la deriva en nuestros mares.
La propuesta, una idea de la Comisaria de Pesca Maria Damanaki, trata de salvar el mar Mediterráneo de su progresiva agonía y deterioro, ya que se ha convertido en un vertedero donde bajo sus azules aguas se esconden millones de toneladas de plástico, entre otros residuos originados por los humanos.
La comisión quiere atacar el problema de raíz, para ello está estudiando medidas educativas, de control y por supuesto sanciones. Desgraciadamente, estas medidas ya se presupone que no serán suficientes, por lo que quieren volver a recuperar aquellos envases y bolsas que navegan a la deriva por los mares.
La idea tiene muchas ventajas, como la descontaminación de los mares, el reciclado de muchos desechos que puede dar beneficios, el dar una ocupación a pescadores, reportándoles ingresos adicionales y por último, conservar los ecosistemas y vida en los mares que los seres humanos están llevando al desastre.
Las diferencias entre la recogida de residuos del mar, con las de la pesca son grandes, ya que los trabajos de recolección de residuos hay que hacerlos en la superficie. Por eso el tipo de redes e instrumentos utilizados son más parecidos a los que emplean los servicios de limpieza de mareas negras, que los propios de los pescadores. Las redes han sido diseñadas para que con ellas solo se arrastre aquello que está en la superficie de las aguas, sin alterar la vida bajo la superficie.
El éxito de esta iniciativa ahora está en el tejado de los países miembros, pues son estos los administradores del Fondo Europeo de la Pesca, ya que la Comisión no ha tramitado la idea como una iniciativa legislativa, ni un plan que pretenda imponer.
Los beneficios a simple vista parecen importantes para todos, pero estoy seguro que no todos lo van a ver de la misma manera. Ya han surgido voces escepticas a la propuesta por parte de los propios interesados, los pescadores. Todavía existe mucha insensibilidad hacia el medio ambiente y hacia lo que es de todos.
Desde Ecomania un saludo a todos,
C&B
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