Aunque todavía no se puede cantar victoria, si que hay una gran esperanza sobre la supervivencia de esta especie en la Península Ibérica. En la primera fase del programa, los investigadores empezaron por criar y reproducir algunos ejemplares en cautividad, para asegurarse la supervivencia de la especie, ya que el lince en su hábitat salvaje, corría un serio peligro de desaparecer.
En la actualidad se cifra en unos 312 ejemplares de este felino en Sierra Morena y en el Parque de Doñana y Bruselas pretende financiar el 40% de los 26 millones de euros que se pretenden gastar en extender su población a regiones cercanas, como Extremadura, Castilla la Mancha, Murcia y Portugal, el cual comenzaría en Mayo del 2014.
Este mismo modelo de reproducción de una especie en peligro de extinción, se podría llevar a otras especies y regiones del mundo y ayudaría a salvar miles de especies amenazadas. Todo un buen ejemplo de buen hacer.
Saludos a todos desde Ecomania,
C&B
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